lunes, 14 de mayo de 2012

.... Y AHORA ESCRIBIMOS

Como habéis demostrado ser unos buenos lectores, hemos decidido proponeros que sigais el consejo que Tom Fernández os dio el día que estuvo en nuestro cole: "Animaos y escribid sobre las cosas que os pasan, escribid historias sobre lo que veis, lo que os rodea..."

A continuación tenéis el comienzo de una historia que tendréis que desarrollar pero SIN contar el final.
¡Ánimo y echadle imaginación a la tarea!


La casa embrujada estaba en un terreno oscuro y pantanoso. A pesar de lo que contaban de ella, los chicos decidieron visitarla. Andrés, el más valiente de todos, iba encabezando la expedición. Caminaron durante casi una hora para llegar al viejo y misterioso caserón y, cuando estaban muy cerca, sucedió algo que les puso los pelos de punta...

9 comentarios:

  1. Un cartel ponía,quien etre en esta casa no volvera salir.Andres dijo que esoera una broma y Lucas le siguio.Al entrar en la casa vieron una sombra de una persona yLucas se desmallo .Andres sin saber que hacer,dejo a Lucas en el suelo y siguio caminando y se encontro con una fantasma pero cogio una maza de una armaduray despues de una dura batalla consiguio vencer.Despues fue al sotano en el que se decia que habia un ogro.Andres abrio la puerta y..........

    ResponderEliminar
  2. Alberto Cabo Cobrana15 de mayo de 2012, 4:28

    De repente, un fantasma salió de detrás de un árbol y todos salieron corriendo hacia sus casas.
    Cuando llegaron a sus casas se lo empezaron a contar todo a sus padres. Al día siguiente todos los padres se reunieron en una casa para contarse lo que sus hijo le habían contado. Decidieron ir a investigar todos juntos.
    Cuando llegaron se separaron en grupos para buscar las entradas de la casa.
    Cada grupo encontró una que daba a un lugar diferente.
    Cuando entraron ,vieron que allí vivía alguien porque había comida, en el salón una tele, en las habitaciones ropa ...

    ResponderEliminar
  3. Fuera del caserón vieron algo muy extraño que no les gustó nada. Allí fuera había un señor muy raro. Era como un espantapájaros. Los 4 chicos decidieron acercarse para comprobar con sus ojos qué era aquello. Se escondieron detrás de un arbusto y fueron caminando sigilosamente. Cuando estaban llegando al lugar, Marcos pisó un palo que hizo un ruido no demasiado fuerte pero sí lo suficientemente fuerte para que el extraño señor los oyera y se acercara a ellos. Los 4 chicos aterrorizados no pudieron escapar y el extraño señor, que al final pudieron comprobar que era un espantapájaros humano, los atrapó y se los llevó al caserón. Allí los ató de pies y manos. Las cuerdas de Laura estaban muy flojas y pudo soltarse y ayudar a sus 3 amigos. Cuando los 4 estaban sueltos, se levantaron sigilosamente. Pero antes de salir algo pasó… El espantapájaros los había llevado a un lugar raro, ya no estaban en el viejo caserón, o por lo menos eso era lo que ellos pensaban…

    ResponderEliminar
  4. El dueño de la casa salió. Era un horroroso fantasma, alto, gordo y muy feo. Los niños se asustaron mucho y echaron a correr. Se escondieron detrás de un árbol para despistarle. Andrés, que era el más valiente, decidió enfrentarse a él. Los otros niños, María, Juan y Raúl, se quedaron escondidos. Andrés le dio un empujón al fantasma para que supiera que estaba detrás de él. El fantasma se enfadó mucho y lo cogió. Los niños se asustaron porque vieron que el fantasma se llevaba a Andrés a su casa. Ellos no podían dejar que se lo llevara. Entonces, a María, que era la más lista, se le ocurrió una cosa: envolver al fantasma con unas cuerdas. Raúl, que por casualidad llevaba cuerdas en el bolso, se las dio a Juan, ya que era muy ágil, y él empezó a correr detrás del fantasma y Andrés. María y Raúl iban de árbol en árbol sin que el fantasma los viera. Cuando Juan logró alcanzarlos, el fantasma se dio cuenta de que alguien estaba detrás. Entonces, se escondió, sin que se diera cuenta Juan, para poder atraparlo también. Juan siguió adelante sin darse cuenta de que detrás de él estaba el fantasma y que estaba apunto de cogerlo. Pero cuando el fantasma lo iba a coger, María y Raúl empezaron a gritar para que Juan corriera. Juan dio un salto, empujó al fantasma y echó a correr. Los otros niños intentaron ayudar Andrés, ya que el fantasma estaba despistado, pero no pudieron porque el fantasma se dio cuenta y los cogió. El fantasma se los llevó a todos a su casa, excepto a Juan que había escapado.

    ResponderEliminar
  5. Marling.

    Vieron a un señor desconocido. Se les pusieron los pelos de punta porque el señor les miraba con una cara muy extraña. Andrés que era el más valiente, también se asustó mucho. Lucía, la más miedosa, no tuvo miedo de nada. Se acercó al señor y le hizo varias preguntas. Al ver que este no respondía, David, el hermano de Lucía, vio un cubo y un río que bajaba de la montaña y decidió ir a por agua al río con el cubo. David, como era el graciosillo del grupo, le echó al señor el cubo con agua por la cabeza, pero el señor seguía atontado. Mateo, el primo de Andrés, decidió, para llamarle de alguna forma, ponerle de nombre Mente Fría, porque Mateo veía una serie de televisión, y había un personaje al que le decían Mente Fría. Todos se echaron a reír, porque el personaje de la serie era muy gracioso. Pero cuando uno de ellos dijo el nombre Mente Fría se despertó y…

    ResponderEliminar
  6. Javier Fernandes Bessa23 de mayo de 2012, 5:17

    Se pusieron todos a temblar y Andrés entró corriendo. Cuando iba a abrir la puerta saltó un payaso con un gato en la mano desangrándose. Andrés y sus amigos siguieron adelante y, de repente, apareció una cocinera con un cuchillo de carnicero lleno de sangre y a Samanta, la novia de Andrés, le dijo
    - Andrés, vámonos que tengo miedo.
    - Corre, cobarde, nos persigue un payaso con un gato en la mano -dijo Andrés.
    -Vale, pe-pero con cuidado -dijo Samanta.

    Entonces, subiendo a la primera planta, se encontraron a sus otros amigos: Andrea, Pablo, Claudia, Ángel y Antonio.

    Siguieron todos juntos y vieron una sala de juegos. Se pusieron a jugar a la X BOX 360, play station 3. Como Samanta era la más miedosa, se quedó en una esquina agarrando un osito de peluche.

    Antonio era un poco miedica pero, como en casa tenía a un hermano que le estaba todo el día dando sustos, fue perdiendo el miedo. De repente, alguien abrió la puerta. Era el padre de Antonio, que se llamaba Rufino, con un hacha en la espalda y le dijo a su hijo que se vengara de su muerte.

    Salieron todos de la casa encantada cada uno por su lado. Antonio se vengó y puso dinamita alrededor de toda la casa. Cuando explotó, se escuchó “¡pum!” y la casa se convirtió en escombros. El payaso con el gato y la cocinera del cuchillo murieron y la habitación de animales (en la que sobre todo había gatos) desapareció.
    Y entonces Antonio volvió a ser feliz…..

    ResponderEliminar
  7. Javier Fernandes Bessa30 de mayo de 2012, 5:16

    YO TERMINARÍA LA HISTORIA DE CARLA ASÍ:

    Pero como era el más patoso se cayó al suelo y el fantasma le agarró y lo llevó para su casa también. Finalmente, el fantasma los mató a todos para hacerse una sopa para cenar.

    ResponderEliminar
  8. Yo creo creo que la historia de Javier podría acabar así:

    ...con sus amigos, ya que la casa de los malos había desaparecido y se habían muerto.

    Carla Arias Álvarez

    ResponderEliminar
  9. Alejandro Calzón Menéndez6 de junio de 2012, 4:39

    Se encontraron a un hombre con muy mal aspecto (parecía una representación de la muerte) que les dijo:
    -Si no dais la vuelta moriréis.
    Ellos cogieron un poco de miedo pero Andrés, que era el más valiente, decidió no rendirse. Siguieron caminando hasta la casa, que estaba muy cerca. Entraron en ella. La casa estaba muy oscura y no veían nada. Uno de ellos dijo:
    - Mejor damos la vuelta.
    Todos se quedaron pensando en la idea de aquel niño pero Andrés dijo:
    - Continuaremos caminando por el pasillo.
    El pasillo era muy largo. Al fondo, Andrés, que era el que iba en primera fila. Iba a entrar a una habitación. Allí se tropezó con algo, lo que le impidió entrar a la habitación. La casa estaba tan oscura que no se veía lo que era aquello con lo que había tropezado. Todos, un poco atemorizados, tocaron aquello. Andrés dijo: - Parece un cadáver humano.
    Otro niño llamado Izan dijo:
    - Opino lo mismo, es un cadáver humano.
    Una niña dijo:
    - Creo que no está muerto.
    Andrés dijo:
    - Que va, está muerto o, ¿no ves que no se mueve?
    Izan dijo:
    - Hagamos algo: voy a ir yo a casa a buscar una linterna para así saber realmente lo que es esto.
    Todos estuvieron de acuerdo con la idea.

    Izan se fue a su casa a por la linterna. Iba caminando por el pasillo y, justo cuando iba a salir de la casa misteriosa, el hombre con el que se habían encontrado antes de entrar a la casa lo detuvo. Izan se quedó horrorizado. El señor le preguntó:
    - ¿Dónde vas tan deprisa muchachito?
    Él tenía tanto miedo que respondió:
    - Me voy de este lugar.
    El hombre dijo:
    - Os advertí que no entrarais y me habéis desobedecido, pues ahora lo vais a pagar con la muerte.

    Izan iba a gritar y, justo cuando abrió la boca, el hombre sacó con gran velocidad un cuchillo del bolsillo y se lo clavó en la garganta. El cuchillo atravesó el paladar del niño.
    El hombre lo dejó desangrarse.
    Izan iba a pedir auxilio pero estaba tan herido, que no tuvo fuerzas para hacerlo. El hombre vio sus intenciones y dijo:
    - Te morirás lentamente, igual que miles de personas que desangré y dejé muertas en la habitación del fondo.
    El niño dijo que no quería morir pero el hombre le replicó:
    - Ah, ya sé, tengo una idea. A ti te dejaré que te desangres y cuando casi estés muerto te quemaré y te dejaré en la cocina, que es la parte de la casa donde están los quemados. --- ¡Jajajajajaja! - rió el hombre con malicia…

    ResponderEliminar